¿Reaparece El Cuarto Poder en Chile?

Para los que no somos tan jóvenes, el que aparezca en público un periodista valiente e independiente es todo un refresco.

Deben saber los jóvenes que Chile no fue siempre así como lo ven. Nuestro periodismo fue señero en cuanto a cuanto a valentía e independencia, así como comprometido con altos valores éticos y morales.

Existía El Mercurio, que se conserva más o menos igual: mintiendo y distorsionando la realidad en favor de un sector de nuestra sociedad ¿para eso están no?. Pero por el otro lado estaba El Clarín, que expresaba la opinión del otro lado con un lenguaje descarnado y duro, pero de calidad, con información verídica, tal como nos mostró Claudio Elórtegui en el llamado "Debate" Presidencial.

Esta profesión es así en la mayoría de los países desarrollados (hablando de desarrollo cultural, no de esta peste que es el sistema económico). Solo en los países subdesarrollados culturalmente se tiene temor en decirle sinvergüenza al que miente, ladrón al que roba y asesino al que mata. Acá los calzonudos usan el eufemismo "presuntamente".

Pero esta censura no es un asunto oficial, no existe una censura formal, algo de eso hay en los dueños de los medios de comunicación, pero no es algo tan evidente. Existe algo peor que eso y es LA AUTO CENSURA, el temor a la sanción, pero sobre todo a quedarse sin pega, sin platita para consumir.

Eso es el producto de un sistema económico despiadado y los largos años de dictadura. 17 años de terror y castigo no se borran de un plumazo. Son 17 años de lavado de cerebros. Pasarán todavía muchos años para que Chile recupere su nivel cultural, si es que alguna vez eso ocurre. España es un ejemplo vivo de la perdida de cultura a causa de una dictadura.

Lo de Elórtegui es ya un paso adelante y si existieran (y toleráramos) a periodistas como él, no estarían en los medios esas caras bonitas que pasan las noticias como anuncios publicitarios, caminando sobre huevos y poniendo carita de perdón.

Más importante: no se presentarían personas tan elementales como los que hoy aspiran a ser nuestro Presidente. Uno de ellos un vendedor de pomadas y mentiroso contumaz, el otro algo atontorronado pero decente.

Pero aún mas importante: el periodismo sería lo que fue en Chile y es en un país culto: EL CUARTO PODER.